Es inevitable que te encuentres con terceros en algún momento de tu relación. Ya sea tu amigo que no deja de controlarte, el chico que conociste en un bar o incluso tus padres que conocen a su futuro yerno por primera vez, las relaciones con terceros son inevitables. Estas terceras personas pueden ser inofensivas o pueden suponer un problema, dependiendo del nivel de confianza que tengas con ellas. Para asegurarse de que su relación siga siendo privada y esté protegida, tiene que tomar ciertas precauciones. Aquí hay cinco hechizos que mantendrán a terceras personas alejadas de tu relación:
Establecer límites claros
Lo primero y más importante es establecer límites claros con todas las terceras partes. Esto no sólo se aplica a tus amigos y familiares, sino también a tus compañeros de trabajo, a tu jefe e incluso a tu pareja. Establece límites en el trabajo, como llevar tu relación en la manga en el trabajo o mantener tu relación con tu jefe en privado. Establece límites con tu pareja y asegúrate de que no hablas de tus amigos o de tu familia delante de ellos, o de que no hablas de tu relación demasiado a menudo o demasiado a la ligera con tu pareja. Recuerda que tu relación es privada, por lo que los demás no tienen derecho a conocerla. Al mismo tiempo, tienes que ser abierto y honesto con tus terceros. No quieres mentirles, pero tampoco quieres contarles todo. Si se sobrepasan los límites, se sentirán desconfiados, mientras que si se sobrepasan demasiado, parecerá que no le interesan sus preocupaciones. Sé abierto y honesto, y crearás una sólida base de confianza con tus terceros.
Utiliza siempre la protección
Al igual que no acudirías a una primera cita sin protección, tampoco deberías hacerlo con tus terceros. Antes de quedar con tus amigos, concertar un encuentro sexual con uno de tus ex, o tener una cita con algún chico que hayas conocido en un bar, ponte siempre un preservativo. Esto no sólo evitará que tu relación se vea comprometida, sino que también protegerá tu salud al evitar el contagio de enfermedades como el VIH, la gonorrea y la sífilis. También creará un límite fuerte y claro entre tus terceros y tu relación. Si tienes un problema con la persona con la que sales, cuéntale tu relación y deja claro que no tiene derecho a saberlo. Si un tercero traspasa los límites, házselo saber a tu pareja y asegúrate de que ambos usáis protección.
Pide siempre permiso antes de hacer fotos o vídeos.
Cuando tu pareja te haga fotos o vídeos durante vuestra relación, pide siempre permiso primero. Pide permiso a tu pareja antes de hacerle fotos o vídeos con la ropa puesta, o en el acto de tener intimidad contigo. Esto protegerá la intimidad de tu pareja y también te protegerá a ti de ser acusado de acoso o de hostigamiento. Al mismo tiempo, asegúrate de que llevas la cuenta de esas fotos o vídeos. Si no está seguro de dónde se guardan, pregunte a su pareja antes de tomarlas. Si tienes una relación en la que tu pareja te maltrata o acosa, llama a la policía y/o consigue una orden de alejamiento. Esto te protegerá de tu pareja, al tiempo que la protegerá de ser acusada de acoso o abuso.
Sé escéptico con las comunicaciones inesperadas
Las comunicaciones de terceros son una señal de que algo va mal. Ante todo, debe ser escéptico ante cualquier comunicación que provenga de su amigo o familiar. Lo más probable es que estas comunicaciones provengan de su pareja, y si no provienen de ella, significa que se supone que no deben saber nada de su relación. En segundo lugar, debes ser escéptico con las comunicaciones que provienen de tu SO. Lo más probable es que su pareja quiera comunicarse con usted, así que si empieza a comunicarse con su SO, es una señal de que algo va mal. Hay dos escenarios posibles: o bien tu pareja está tratando de recordarte amablemente que vuestra relación debe ser privada, o bien te está amenazando. En cualquier caso, debes estar en guardia. En tercer lugar, debes ser escéptico con respecto a las comunicaciones que provienen de tu ex. Esta es la más peligrosa de las tres, ya que podría ser una estratagema para que te reconcilies. Es posible que tu ex se haya enterado de tu relación o que simplemente quiera volver a tu vida. En cualquier caso, debes ser escéptico ante cualquier comunicación de tu ex y asegurarte de mantener las distancias.
No pierdas el tiempo con personas tóxicas
Las personas tóxicas son personas que no merecen tu tiempo. Tanto si se trata de tus amigos como de tu ex, siempre debes estar en guardia con las personas que no merecen tu tiempo. Las personas tóxicas suelen ser personas que intentan aferrarse a personas exitosas o ricas. Suelen proceder de los márgenes de la sociedad y suelen ser el tipo de personas que quieren controlar a los demás. Este tipo de personas son tóxicas porque son parasitarias. Quieren aferrarse a ti, utilizarte y controlarte. No les interesa desarrollar relaciones genuinas, porque este tipo de relaciones no son sobre ellos, sino sobre la otra persona. No se trata de hacer amigos, sino de utilizarte para conseguir lo que quieren. No son felices a menos que se quejen, y no son felices a menos que intenten que te vengues de tu pareja o de tus amigos.
Concluyendo
Las relaciones son complicadas, y cuando se añaden terceras personas a la mezcla, se vuelven aún más complicadas. Para mantener tu relación privada y protegida, tienes que establecer límites claros con tus terceros, utilizar siempre protección y ser escéptico ante las comunicaciones inesperadas. Al mismo tiempo, tienes que ser claro y honesto con tus terceros, y tienes que mantener tu relación con personas tóxicas fuera de tu vida.